Las calderas ASTRA funcionan según el principio de la generación de gases. En la cámara superior de la caldera se produce gas que proviene del combustible sólido. Estos gases son quemados en la cámara inferior a una temperatura elevada de unos 900°C. Al quemar el combustible sólido se produce el fenómeno de gasificación, la combustión es más eficaz, se producen menos cenizas y se emiten menos gases residuales, como el CO, a la atmósfera. Otra ventaja de esta caldera es su capacidad de producir calor con una potencia del orden del 40-100%.
El cuerpo de la caldera que está en contacto con los productos de combustión está fabricado en acero para calderas P265GH de 6 mm de espesor. Otros elementos de la caldera son de chapa de acero de 4 mm de espesor.
La duración de una carga de combustible varía entre 5 y 8 horas. Si la caldera funciona al 40% de la potencia nominal, el tiempo de combustión puede ser de entre 8 y 12 horas.
El mantenimiento de la caldera es muy fácil. Las cenizas deben ser limpiadas de una a dos veces por semana.
Todos los modelos de calderas Astra tienen unidad de control electrónica.
Las calderas Astra con unidad electrónica tienen un mando que controla la caldera de manera eficaz. La caldera reacciona de forma precisa y rápida a la evolución de las exigencias térmicas. De este modo, se ahorra combustible. La duración de la combustión es mayor, se minimiza la polución y el control de la combustión es más fácil. Las calderas equipadas con unidad de mando electrónico se identifican con la letra «E».
Todas las calderas Astra están dotadas de un serpentín de refrigeración de emergencia que evita que el agua pueda alcanzar el punto de ebullición en el caso de corte de la electricidad y de paro de la bomba.